El consumo de pornografía en internet ha crecido exponencialmente, afectando especialmente a los adolescentes.

Internet y los celulares han cambiado nuestras vidas en numerosos ámbitos, como el laboral, escolar y social, solo por nombrar algunos ejemplos. En este sentido, también han modificado el consumo de contenidos pornográficos y la forma en que los adolescentes exploran su sexualidad.

Internet y la pornografía

Aunque la pornografía siempre ha existido, el acceso a internet ha facilitado una mayor variedad y consumo de estos contenidos.

En la actualidad, cualquier persona, incluso un menor de edad, puede acceder sin mayores problemas a contenidos pornográficos explícitos desde la comodidad de su hogar, algo muy distinto a lo que sucedía décadas atrás.

Sexualidad y pornografía

Es importante aclarar que el consumo de pornografía no es inherentemente malo o inadecuado. Al contrario, es algo normal y común.

En adolescentes y jóvenes, puede ser una forma de explorar su sexualidad y su cuerpo de una manera más íntima.

Sin embargo, otra cuestión es el consumo compulsivo o adictivo de este contenido.

Las nuevas adicciones del siglo XXI

Se habla de adicción cuando una conducta se vuelve compulsiva y el individuo no puede regularla, afectando y deteriorando su vida:

• social,
• física,
• escolar
• y familiar.

En el caso de la adicción a la pornografía, el sujeto necesita consumir estos contenidos cada vez más, pasa la mayor parte de su tiempo en ello y deja de lado actividades sociales o escolares.

¿Qué pasa en la adolescencia?

Aunque una adicción es negativa a cualquier edad, lo es más en la adolescencia, ya que el sistema nervioso de los jóvenes está en desarrollo y el ciclo de comportamiento compulsivo es más difícil de detener.

Además, la falta de maduración de la corteza cerebral genera mayores dificultades para controlar esta conducta y evaluar los peligros de la adicción, así como sus consecuencias negativas.

Consecuencias de esta adicción

Las consecuencias son múltiples:

• mayor aislamiento,
• depresión,
• consumo de sustancias tóxicas como el alcohol,
• sedentarismo,
• problemas de sueño,
• efectos negativos en la salud física,
• mayor impulsividad
• y falta de inhibición.

Además, puede generar problemas de:

• satisfacción sexual,
• ideas erróneas sobre la sexualidad,
• dificultades en los vínculos interpersonales
• y disfunción eréctil.

La alteración del circuito de recompensa con el incremento de dopamina (neurotransmisor asociado a la gratificación y motivación) genera cambios químicos y estructurales en el cerebro.

Deep web y pornografía

En la deep web o internet profunda –donde se puede encontrar contenido no indexado por los motores de búsqueda–, también es posible hallar material sexual sumamente explícito o ilegal, lo cual puede potenciar ideas incorrectas sobre la sexualidad o la violencia.

Cifras sobre la problemática

Como ocurre con muchas adicciones, cada vez se inician a edades más tempranas.

Por ejemplo, en 2020, un estudio señaló que entre los 11 y 13 años de edad, el 50% de los jóvenes ya había consumido pornografía, y casi el 80% de los adolescentes entre 16 y 17 años lo había hecho.

La edad promedio de inicio del consumo es de 8 años, según un estudio de Save the Children (2023).

Esta situación se agravó con la pandemia de COVID-19 debido al mayor acceso a dispositivos digitales.

Además, el consumo temprano de este material se asocia con otras problemáticas, como:

• la adicción a los videojuegos,
• el uso excesivo de redes sociales,
• y también con el riesgo de grooming* (proceso por el cual un adulto busca ganarse la confianza de un menor con fines sexuales).

*Hemos escrito un artículo completo sobre el grooming, que puedes leer haciendo clic aquí.

¿Qué sucede en Argentina y con sus adolescentes?

En Argentina, las investigaciones sobre este tema son casi inexistentes.

Sin embargo, se ha señalado que esta conducta aumentó en un 45%, con 8 de cada 10 personas consumiendo material pornográfico a través de dispositivos como celulares y tabletas, siendo más común entre varones que entre mujeres, según el Observatorio Argentino de la Internet (2016). Los datos sobre adolescentes en la actualidad siguen siendo escasos.

Cómo prevenir esta problemática desde la escuela y el hogar

Es fundamental enseñar un uso responsable de las nuevas tecnologías, estableciendo reglas y límites claros.

También es importante hablar de la sexualidad como una parte normal de la vida humana, utilizando fuentes científicas (al final del artículo puedes encontrarás algunas).

Existen señales de advertencia sobre este problema en menores de edad:

• aislamiento,
• irritación,
• ansiedad,
• deterioro en el rendimiento escolar,
• comportamiento y lenguaje fuera de lo común,
• cambios llamativos en la conducta,
• pasar largas horas con el celular
• y ocultar o mentir sobre su uso, entre otras.

Para profundizar tus conocimientos en este tema

Adicciones en Adolescentes: Apuestas Online, Redes Sociales y Pornografía. Curso dirigido a profesionales y padres que deseen aprender a identificar, prevenir y actuar ante estos problemas.

Bibliografía:

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Cómo citar esta publicación: Resett, S. (2024). Adicción a la Pornografía: “El Mundo de XVideos y Pornhub es Distinto del Mundo Real”. Asociación Educar para el Desarrollo Humano. www.asociacioneducar.com/blog/adiccion-a-la-pornografia-el-mundo-de-xvideos-y-pornhub-es-distinto-del-mundo-real/