El ABC de la Neuropsicología de la Educación

Experiencia de Neuroaprendizaje en Argentina

En los E. O. E (Equipos de Orientación Escolar) de la D.G.C. y E. (Dirección General de Cultura y Educación) de la provincia de Buenos Aires, las evaluaciones neuropsicológicas no son una práctica habitual.

Durante la década de los 90, el sistema socioeconómico imperante fue determinante en la implementación de un sistema educativo que destruyó y fragmentó no solo la educación de nuestro país sino también de todo el sistema educativo. Tanto su organización como desarrollo curricular fueron dispuestos desde organismos supranacionales por medio de los acuerdos que dieron origen a la inadecuada Ley Federal de Educación y los C.B.C. (Contenidos Básicos Comunes).

Al mismo tiempo que se destruía el sistema educativo, se fue desmembrando el sistema productivo, con lo que se incrementó a niveles nunca vistos la desocupación y subocupación, surgiendo así los cartoneros y otros tipos de sujetos que, marginados de los sistemas laborales tradicionales, apelaron al ingenio para sobrevivir, la situación se puede describir en términos de Bronfenbrenner (1987).

 

RESUMEN

 

Las dificultades de aprendizaje, definiciones y evolución histórica de los conceptos

Tras la definición de Kirk (1962), a comienzos del año 1987 se forma el Interagency Committee on Learning Disabilities (ICLD, como se citó en Aguilera, 2004), con 12 agencias del Department of Health and Human Service and the Departament on Education, y realizan lo que podríamos denominar la definición oficial realizada por un comité gubernamental.

Esta definición dice: Las dificultades de aprendizaje son un término genérico que se refiere a un grupo heterogéneo de trastornos manifestados por dificultades significativas en la adquisición y uso de la recepción, habla, lectura, escritura, razonamiento, o habilidades matemáticas, o de habilidades sociales.

Estos trastornos son intrínsecos al individuo y se presume que son debidos a la disfunción del sistema nervioso central. Incluso aunque un problema de aprendizaje pueda ocurrir concomitantemente con otras condiciones incapacitantes (por ejemplo, déficit sensorial, retraso mental, trastorno emocional o social), con influencias socio-ambientales (por ejemplo, diferencias culturales, instrucción insuficiente o inapropiada, factores psicogénicos), y especialmente trastornos por déficit de atención, todos los cuales pueden causar dificultades de aprendizaje, una dificultad de aprendizaje no es el resultado directo de estas influencias o condiciones (Interagency Committee on Learning Disabilities – ICLD– 1987, como se citó en Aguilera, 2004, p. 51).

 

¿Lesión o disfunción cerebral?

Quien primero advirtió estas características de pautas desiguales de desarrollo fue Gallagher (1966, como se citó en Dansilio, 2009) al considerar el concepto de niño cerebralmente lesionado. Este autor propuso el concepto de desequilibrio evolutivo para reemplazar al comúnmente utilizado término de lesión cerebral.

Señaló que el desequilibrio evolutivo sugería el desarrollo irregular, frecuentemente descrito en niños con lesión cerebral, tratando de utilizar una definición que abarcase la amplia variedad de conductas manifestadas, dice Gallagher (1966, como se citó en Miranda, 1986): Una salida para este dilema es centrarse en una definición de pautas de habilidades más que en habilidades específicas.

Niños con desequilibrios evolutivos son aquellos que revelan una disparidad evolutiva en el proceso psicológico, conectada a la educación en tal grado (a menudo cuatro años o más) como para requerir el programa educativo de tareas evolutivas apropiado a la naturaleza y al nivel del proceso evolutivo desviado…Aquí se pone énfasis en la conducta, en las pautas de desarrollo con pocas asunciones sobre la etiología neurológica (p. 34).

El debate existente y controversial en el contexto argentino e internacional, gira en torno a si un niño con trastornos de aprendizaje ha sufrido o no lesión cerebral, fue fundamental en el desarrollo de este campo. Una vez que comenzó a reconocerse que algunos niños con un C.I. normal o límite fue en ese momento en que el concepto de lesión Cerebral Mínima (LCM) se popularizó. Los niños presentaban las mismas características anormales de producción; pero, en menor grado que los niños con lesión cerebral, por lo que se los diagnosticó como niños con LCM; al ser las producciones de estos niños con anormalidades muy sutiles, se consideraba que la lesión del cerebro era menos grave.

La popularidad general del término LCM duró poco tiempo. Los profesionales manifestaron su desagrado por la forma en que se diagnosticaba la LCM. No debe olvidarse que la malnutrición y la desnutrición son variables que pueden tanto individualmente o en interacción con un entorno pobre, causar trastornos del aprendizaje (Lipina y Segretin, 2020; Rueda y Conejero, 2020; Pakulak y Stevens, 2020).

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Autores:

  • Pedro C. Martínez Suárez – Laboratorio de Psicometría, Psicología Comparada y Etología (LABPPCE). Universidad Católica de Cuenca, Ecuador.
  • Oscar Arístides Palacio – Dirección General de Cultura y Educación de la provincia de Buenos Aires, Argentina.
  • Nicolás Parra Bolaños – Asociación Educar para el Desarrollo Humano.
  • Ana L. Villazhiñay-Matute – Laboratorio de Psicometría, Psicología Comparada y Etología (LABPPCE). Universidad Católica de Cuenca, Ecuador.
Cómo citar esta publicación:

Martínez Suárez, P. C., Arístides Palacio, O., Parra-Bolaños, N., y Villazhiñay-Matute, A. L. (2023). Experiencias de neuroaprendizaje en argentina. El abc de la neuropsicología de la educación. En Cevallos Uve, G. E., Santos Villalba, M. J., Alcalá del Olmo Fernández, M. J., y Álvarez Ferrándiz, D. (Eds.), Educación integral con perspectivas innovadoras para el desarrollo educativo (pp. 255-263). Dykinson.
Investigador Asociado del Ministerio de Ciencia Tecnología e Innovación (Minciencias), Colombia; Doctor en Ciencias de la Educación, Universidad Cuauhtémoc; Máster en Neuropsicología y Educación; Autor y coautor de más de 40 publicaciones científicas; Revisor Invitado para más de 10 revistas indexadas.