El sistema instintivo sufre de neofobia (miedo al cambio) lo que explicaría (en parte) nuestra resistencia al cambio y nuestra tendencia hacia los comportamientos rutinarios y hábitos.
Los cerebros instintivo y emocional están configurados para sobrevivir. Por esta razón, es necesario que los docentes generen mensajes y contenidos que sean personales para captar la atención de sus estudiantes y, de esa manera, generarles motivación intrínseca.
Los estudiantes no están biológicamente motivados para atender y comprender nuestras clases. Por esto, para llegar hasta su corteza racional, es importante captar mediante estímulos a los cerebros instintivo y emocional.