- 23 de Septiembre de 2014
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Autor: Prof. Carlos Teisaire
Nuestro circuito de recompensa, con su preciado neurotransmisor la dopamina, puede ser tanto un aliado como también un talón de Aquiles. Aprender a utilizarlo nos permitirá educar el circuito dopaminérgico de gratificación, incentivándonos a llegar a los logros de largo plazo.