
Ilustración neurociencias: Órganos circunventriculares
Los órganos circunventriculares (OCV) son estructuras cerebrales especializadas que se localizan alrededor del tercer y del cuarto ventrículo. Se diferencian del resto del parénquima cerebral porque son áreas altamente vascularizadas que no poseen barrera hematoencefálica (BHE).
Estos órganos neurohemáticos se clasifican como sensoriales cuando contienen neuronas que pueden recibir señales químicas desde la sangre.
Por todo esto, los OCV sensoriales posibilitan la comunicación entre la sangre, el líquido cefalorraquídeo y el parénquima cerebral.
Se considera que existen ocho OCV: tres sensoriales, cuatro secretorios y uno que aún no ha sido clasificado. Los OCV sensoriales incluyen al órgano subfornical, el órgano vascular de la lámina terminalis y el área postrema (que es el centro del vómito).
La neurohipófisis, la eminencia media, la glándula pineal y el órgano subcomisural son los OCV secretorios. Entre sus funciones podemos describir el mantenimiento de la homeostasis de los fluidos corporales, la regulación del reflejo del vómito, la regulación cardiovascular y la generación de respuestas centrales febriles e inmunológicas.
Para cumplir con estas funciones, los OCV están conectados con el hipotálamo, el bulbo y el eje hipotálamo–hipofisario. Son vulnerables a los gérmenes patógenos circulantes y pueden ser portales para su entrada al sistema nervioso.
Bibliografía:
• Kiecker C. (2018). The origins of the circumventricular organs. Journal of Anatomy, 232(4), 540–553. https://doi.org/10.1111/joa.12771