La risa es una respuesta que debemos emplear con mayor frecuencia. Diversas investigaciones mostraron cómo las personas que se toman la vida con más humor y menos enojos llevan una vida con menos estrés y más saludable.
A través de simples ejercicios podemos activar las neuronas espejo de nuestros alumnos, contagiándoles un buen estado de ánimo. De este modo, aumentaremos los niveles de atención, generando un estado ideal para iniciar una clase.